Madrid, 25. Casi coincidiendo con el estreno de “La guerra de las Galaxias: Episodio VII. El despertar de la fuerza”, que tendrá lugar el  próximo 18 de diciembre en nuestro país, el madrileño Teatro Real ofrecerá, siete días más tarde (el día de Navidad), un concierto-homenaje dedicado al compositor de la música cinematográfica más famosa y pegadiza de los últimos 50 años: John Williams.

La iniciativa ha partido de Lucas Vidal, el joven compositor español de bandas sonoras como “Mientras duermes” (Jaume Balagueró, 2011), “El enigma del cuervo” (James McTeigue, 2012), “La fría luz del día” (Mabrouk El Mechri, 2012), “Fast & Furious 6” (Justin Lin, 2013), “Nadie quiere la noche” (Isabel Coixet, 2015) o “Palmeras en la nieve” (Fernando González Molina, 2015).

Vidal es un prometedor compositor español (nació en Madrid en 1984) que compagina su trabajo entre Hollywood y España, y que según confiesa, “Tengo en John Williams a mi principal referente musical”. Y su particular homenaje consistirá en la celebración de un único concierto, como decimos en el Teatro Real, donde dirigirá a la Barbieri Symphony Orchestra que interpretará exclusivamente bandas sonoras de Williams.

El evento ha sido bautizado como “Música de cine: homenaje a John Williams”, en el que el compositor madrileño hará un recorrido musical y visual por la trayectoria del gran maestro estadounidense a través de sus obras más representativas.

¿Qué cuáles son? Pues todas aquellas que más tararean y silban los públicos de todo el mundo: “Superman”, “E.T.”, “La Lista de Schindler”, “La guerra de las Galaxias”, “Harry Potter”, “Tiburón”, “El violinista en el tejado”, “Parque Jurásico”, “Sólo en casa”, “JFK”, “Hook” o “Indiana Jones”.

Un impresionante y brillante elenco de películas, casi todas con secuelas, que han convertido al compositor nacido en 1932 en Nueva York, en el músico más famoso y apreciado de los últimos 50 años (inició su carrera en 1962, poniéndole música a “Daddy-O” (Lou Place, 1958).

Para Lucas, “Dirigir la música de Williams en mi propio país es un sueño hecho realidad. Desde que tengo uso de razón, su música ha constituido la banda sonora de mi vida, al igual que lo ha sido para tantas otras personas, de mi edad y de otras generaciones”. Así que ya lo saben: a disfrutar de un “clásico” de la música de cine, incluso antes de morirse: si encuentran entrada, claro.

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