Hace un año, Luis Fraile, en representación de Divisa Home Video, y Enrique Cerezo, propietario de Mercury Films, anunciaron una colección de cine español, distribuida por la primera, en la que además de informar que saldrían películas que no se habían estrenado en nuestro mercado (o lo habían hecho hace muchísimos años, en VHS), confirmaban también que todas habían sido restauradas, lo que las hacía más atractivas para el público.
En realidad, más que eso: todas han ido saliendo en Blu-ray, además de DVD, con lo cual la calidad de visionado es de alta definición. Incluso la banda sonora de muchas de ellas ha podido beneficiarse de esta “reconstrucción técnica”, realizada en los laboratorios de Mercury Films por expertos en la materia. El resultado es magnífico: 107 títulos, casi tan nuevos como cuando se estrenaron, en los 13 primeros lanzamientos (a una media de casi 9 por mes). E insistimos: ¡en HD!
Pero tanto el propietario como el distribuidor del catálogo (aún faltan más de un centenar de títulos para completarlo), no se han conformado con ofrecerlo en las mejores calidades de visionado y sonido, sino que han hecho un esfuerzo en el terreno de la documentación, ofreciendo en cada título las fichas técnicas y artísticas, así como numerosos extras (entre ellos fotografías y el diseño del cartel o guía con las que las películas fueron estrenadas en su día en salas cinematográficas).
El cine español ha tenido siempre un buen gancho entres los aficionados que hablan la lengua de Cervantes, y de hecho ha aparecido con cierta frecuencia en los lanzamientos que se han venido realizando desde los inicios del “home video” en España, allá por los años 80 del pasado siglo.
Los sistemas Beta, VHS, incluso el laserdisc y, por supuesto, el DVD han ofrecido lo mejor de nuestra historia cinematográfica. Pero como una buena parte de ésta se hallaba en condiciones casi catastróficas por el mal cuidado de los negativos, las películas adolecían de fallos en la imagen (rayados, esconchones, etc.) y el sonido (con frecuencia inaudible), cuando no les faltaban escenas e, incluso, secuencias enteras.
Todo esto es lo que se ha remediado con el trabajo de restauración realizado estos últimos años en los laboratorios de Mercury Films. Y había que hacerlo simplemente porque en las tres últimas décadas habían aparecido nuevos televisores y aparatos de reproducción de vídeo en HD que exigían productos de altísima calidad para acoplarse a ellos.
Lo que comprobamos viendo las películas que Divisa Home Video ha lanzado en este primer año, responde a estas exigencias. Y se ha hecho (el trabajo de restauración) no solo con producciones españolas, sino también extranjeras (pertenecientes a Mercury Films).
El último lanzamiento (el del pasado mes de marzo) ha incorporado 6 películas más: “El último caballo” (1950) de Edgar Neville, “Los locos del oro negro” (1976) de Enzo G. Castellari, “La vaquilla” (1985) de Luis García Berlanga, “La Celestina” (1996) de Gerardo Vera, “La cena” (1998) de Ettore Scola, e “Incautos” (2003) de Miguel Bardem.
El de marzo de 2014, el primero de todos, contenía 12: “La Lola se fue a los puertos” (1947) de Juan de Orduña, “Ladrón de bicicletas” (1948) de Vittorio De Sica, “Marcelino, pan y vino” (1954) de Ladislao Vajda, “Historia de la radio” (1955) de José Luis Sáenz de Heredia, “El último cuplé” (1957) de Juan de Orduña, “La Violetera” (1958) de Luis César Amadori, “Plácido” (1961) de Luis García Berlanga, “Gringo” (1963) de Ricardo Blasco, “Lo llamaban Trinidad” (1970) de E.B. Cloucher, “Matador” (1986) de Pedro Almodóvar, “Belle epoque” (1992) de Fernando Trueba y “Las 13 rosas” (2007) de Emilio Martínez Lázaro.
Como se ve, predomina el cine español, pero como hemos dicho hay películas de otros países, sobre todo italianas, y algunas obras maestras, como ese “Ladrón de bicicletas”. Y de todo tipo de géneros. Uno de ellos, por su abundancia, nos llama la atención (en realidad es un subgénero): el “western spaghetti”. Viene como anillo al dedo, ya que es un argumento que está atrayendo cada vez a más público de las últimas generaciones.
Los espectadores de los años en que se rodaron, lo adoraban. Lo demuestra la amplísima filmografía que existe del “western spaghetti”. Y en el catálogo de Mercury Films/Divisa Home Video están presentes, hasta el momento, los siguientes títulos (además de los citados): “Por un puñado de dólares” (1964, Sergio Leone), “Tú perdonas... ¡Yo no!” (1967, Giuseppe Colizzi), “Django” (1966, Sergio Corbucci), “¿Quién grita venganza?” (1968, Rafael Romero Marchent), “Winchester uno entre mil” (1968, Primo Zeglio), “Llega Sartana” (1970, Anthony Ascott), “El hombre de Río Malo” (1971, Eugenio Martín), “Abre tu fosa, amigo, llega Sábata...” (1971, Juan Bosch), “Le seguían llamando Trinidad” (1971, E.B. Clucher), “Viva la muerte... tuya!” (1971, Duccio Tessari), “Mi nombre es ninguno” (1973, Tonino Valeri), “El kárate, el colt y el impostor” (1974, Anthony M. Dawson), “El genio” (1975, Damiano Damiani) y “Dos granujas en el Oeste” (1981, Michele Lupo).
Y llegarán más en los próximo lanzamientos (que recordemos, son mensuales). Pero junto al cada vez más admirado “western spaghetti”, los catálogos de Mercury Films/Divisa Home Video han acercado al público, hasta el momento, a cineastas de la talla (además de los antes citados) de Carlos Saura, Luchino Visconti, Marco Ferreri, José Luis Boráu, Luis Buñuel, Max Ophuls, Michael Powell, Luis Lucia, Manuel Gutiérrez Aragón, Fernando Fernán Gómez, Michelangelo Antonioni, José Luis Garci, Rafael Gil, Víctor Erice, Juan Antonio Bardem, Gonzalo Suárez, Mauro Bolognini, Florián Rey, Vicente Aranda, Benito Perojo o Bigas Luna.
Y con los cineastas, los actores. Para todos los gustos y fans. Nombres, entre los españoles, como Sara Montiel, José Luis Ozores, Lola Flores, Imperio Argentina, Penélope Cruz, José Luis Gómez, Vicente Parra, Javier Bardem, Francisco Rabal, Juanita Reina, Tony Leblanc, Pablito Calvo, Alfredo Landa, Antonio Banderas, Assumpta Serna, Alberto Closas, José Luis López Vázquez, Ana Belén, Carmen Sevilla, Ángela Molina, Antonio Banderas, Alfredo Landa, Paco Martínez Soria, Victoria Abril, Concha Velasco, Rocío Durcal, Geraldine Chaplin, Miguel Ligero, Fernando Rey, Marisol, Emma Penella, José Isbert, Manolo Morán, Lina Morgan y Conchita Montes.
Y entre los extranjeros, Terence Hill, Louis Jourdan, Luis Mariano, Anthony Quinn, Jackie Chan, Lucía Bosé, Hugh Grant, Burt Lancaster, Silvana Mangano, Helmut Berger, Lee Van Cleef, Jeremy Irons, Omero Antonutti, Claudia Cardinale, Gian Maria Volonté, Clint Eastwood, Henry Fonda, Jack Nicholson, Silvia Pinal, Gina Lollobrigida, Joan Fontaine y Fanny Ardant.
Todos ellos y muchos más aparecen en los, hasta ahora, 107 títulos editados. ¿Resultados hasta la fecha? Según el responsable de Divisa Home Video, Luis Fraile, “Muy atractivos para la situación de mercado que tenemos, con una media de 71% de unidades vendidas en DVD y un 29% en BD”. Le preguntamos también por los 10 títulos más vendidos, y menciona “La Violetera”, “Marcelino, pan y vino”, “Las 13 rosas”, “¡Ay Carmela!” (Carlos Saura, 1990), “Amanece que no es poco” (José Luis Cuerda, 1989), “El último cuplé” (Juan de Orduña, 1957), “Las cosas del querer” (Jaime Chávarri, 1989), “Matador” (Pedro Almodóvar, 1986) y “Violetas imperiales” (Richard Pottier, 1952).
“Estamos en el primer año de comercialización –sigue diciéndonos Fraile–, y por lo tanto estos no son los datos definitivos. Hay títulos que ocupan un espacio preferente porque llevan doce meses en el mercado; otros, en cambio, han sido lanzados hace menos tiempo y por eso no figuran entre los mejores. Pero, al final, seguramente, estén en lo más alto. Como se puede ver, funcionan los clásicos, el cine folklórico, los “western spaghetti” y, por supuesto, el cine actual”.
Luis Fraile finaliza su análisis de estos 12 primeros meses así: “Creo que con esta tarea que estamos haciendo, conseguiremos dejar al cine español en el lugar que se merece. Y a sus aficionados, les ofrecemos un amplio abanico de títulos y géneros, entre los que pueden elegir lo que más les guste, en el soporte que prefieran y con la misma calidad o mejor que la que se puede encontrar en las ofertas de clásicos americanos que existen en nuestro mercado actualmente”.